miércoles, 28 de octubre de 2015

Alberto Garzón arrasa en las primarias de AeC

Alberto Garzón ha arrasado en las primarias de la plataforma Ahora en Común a la presidencia del Gobierno. El candidato de IU a La Moncloa será también candidato a presidente por esta plataforma ciudadana en la que se ha integrado su partido para concurrir a las generales. Según los resultados provisionales del comité electoral estatal de Ahora en Común que ha conocido EL PAÍS, Garzón ha logrado el 96% de los votos válidos (23.712 sufragios), frente a los 305 votos que ha logrado el siguiente candidato, Miguel Ángel Vázquez, del Partido por un mundo más justo. IU se presentará a las elecciones en coalición con esta plataforma con una papeleta única.
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En total, 14 aspirantes se habían presentado a las primarias a la candidatura a presidencia del Gobierno de Ahora en Común —que acaba de pasar a llamarse recientemente Unidad Popular—. Ninguno, salvo Garzón, tenía perfil público conocido. La participación, en votos válidos, ha sido de 24.615 sufragios.
La lista Ahora con Alberto, avalada por el candidato de Izquierda Unida Alberto Garzón, también se impuso en las primarias de la plataforma por la circunscripción de Madrid, según los resultados provisionales conocidos ayer. La lista oficialista logró los cinco primeros puestos en la candidatura. El sexto puesto correspondió al candidato de una de las listas alternativas, la de Ahora por la Izquierda, que presentaban miembros de la expulsada federación madrileña de IU en Madrid así como de Izquierda Abierta, el partido de Gaspar Llamazares integrado en IU.
Ahora en Común ha celebrado dos procesos de primarias en paralelo: por circunscripciones, para elegir los candidatos al Congreso y Senado, y para elegir al candidato a presidente del Gobierno. El sistema seguía un formato de listas abiertas, de forma que se podía votar individualmente a cada candidato. La votación presidencial, que terminó ayer a las ocho de la tarde, fue telemática pero también con urnas presenciales. La dirección de IU destaca lo garantista de este proceso de primarias, porque para votar se exigía la copia del DNI u otro documento que acreditara la residencia, con el fin de garantizar que solo se pudiera votar una vez. De la misma forma, el sistema Dowdall o de voto ponderado evitaba el efecto de las llamadas listas plancha que fue criticado en el caso de las primarias de Podemos.
Una vez ha sido confirmado como candidato a presidente, Garzón ocupará el primer puesto de la lista por Madrid. Su número dos será Sol Sánchez, presidenta de Attac España, a quien seguirán Enrique Santiago, abogado y miembro de la Ejecutiva de IU, número tres; Begoña Marugán, activista feminista y profesora en la Universidad Carlos III de Madrid, número cuatro; y Alberto Sotillos, exmilitante del PSOE, número cinco. 
El sexto puesto lo ocupará José Abelardo Andrés Llamas, médico y secretario de Salud de la extinta IU Comunidad de Madrid.

"Quiero ser no solo el candidato de Izquierda Unida, sino el candidato de la unidad popular", dijo Garzón a principios de octubre en su discurso ante el Consejo Político Federal de IU, el máximo órgano de dirección entre asambleas del partido, y cuando aún no se había frustrado el acuerdo con Podemos. El dirigente de IU reivindicaba así su liderazgo en la confluencia de las fuerzas de izquierdas ante el partido de Pablo Iglesias, que sostiene que el instrumento de la unidad popular es Podemos. Ambas formaciones concurrirán finalmente por separado salvo en Cataluña y Galicia, donde irán juntos en una coalición con más partidos. En el resto del país, IU irá acompañado de la plataforma Ahora en Común (Unidad Popular según su nuevo nombre), en la que están integrados otros partidos menores. Podemos, por su parte, concurrirá acompañado de fuerzas como la ecologista Equo.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Creo que Garzón ha hecho todo lo posible (en mi humilde opinión, incluso se ha pasado) para conseguir la confluencia y la unidad de la izquierda, que siempre es importante, pero mucho más ahora, en que nos jugamos tanto. Pero con quien no es de izquierdas ni siente como propios sus valores, no se puede confluir. Y no se puede ni debe confluir con quienes utilizan los valores a su antojo e interés personal: ahora me valen, ahora no me valen.

Mi enhorabuena a Garzón por su elección en las primarias.

“La izquierda sin ilusiones”, interesante artículo de Agustín Moreno, publicado el 29 de octubre: http://www.cuartopoder.es/laespumaylamarea/2015/10/29/la-izquierda-sin-ilusiones/1208

Anónimo dijo...

Lo siento Garzon hoy tras tu intervencion en Moncloa sobre ls unidad de España,me hace no votarte mas.Se esta pidiendo unirte a una declaracion contra una gente que esta cometiendo un delito de sedicion y no una manifestacion marxista

Ashner dijo...

No nos engañemos, Podemos es una organización socialdemócrata liderada con gente muy bien formada pero demasiado encastillada en aulas universitarias con escasa experiencia en el mundo real que les dota de un punto de soberbia intelectual incompatible con la capacidad de diálogo. Y Alberto Garzón es un hombre de izquierdas sin más. Ese pacto, para desgracia de los votantes de ese sector ideológico, es imposible.

B dijo...

Disculpa Ashner, pero no entiendo bien lo que dices. ¿Ese pacto no ha sido posible para desgracia de los votantes del sector ideológico de Podemos o para desgracia del sector ideológico de Izquierda Unida?.
Tampoco entiendo muy bien qué quieres decir cuando afirmas que Garzón es "un hombre de izquierdas sin más".
Considero que Garzón, además de universitario (si tanto importa la titulitis en otros partidos), es un hombre de izquierdas que representa a una nueva generación, una persona que cree en unos valores y los defiende desde hace años, sin ir mudando de chaqueta según sus ambiciones personales; con experiencia en el mundo real y los pies asentados en el suelo; que busca pactos y confluencias sin importarle el poder personal que le puedan reportar, como acaba de demostrar. En fin y para resumir: es un hombre íntegro, que piensa lo que hace, y dice lo que piensa.
Para mi, no es una desgracia no haber conseguido un pacto con Podemos. La izquierda se reorganizará ahora o tardará algo más, pero no importa porque llegarán otras elecciones. Lo importante de verdad es saber dónde está cada uno, lo que defiende y cómo lo hace. El fin no justifica los medios. Y eso Podemos lo ha olvidado.O quizá nunca lo ha sabido y creen que todo vale para subir, sean cuales sean los valores y los principios que se tengan que dejar atrás.

Ashner dijo...

Contertulio B. Es que en el fondo decimos lo mismo. Cuando digo que Garzón, persona admirable, es un hombre de izquierdas sin más me refiero a que no adorna su ideología con pastiches como los señores de Podemos, que reitero son una amalgama de socialdemócratas que parece que acaban de descubrir el Mediterráneo. La pena que me da como votante de izquierdas es que no se haya alcanzado un pacto y se llegue, como siempre, dividido. En cuanto a que el mundo no se acaba con estas elecciones, pues ya lo sabemos, pero entretanto nos seguirán despellejando. Y la gente como yo, pensando qué hacer. Ya me pasó en las municipales. Voté IU y seguro que, gracias a mi voto, sincero e ideológico, contribuí a tener a la carcundia del PP otra vez en el ayuntamiento. Ése es mi dilema y el de mucha gente que conozco: pragmatismo o ideología y sintiendo una gran pena al ver a IU cómo se va convirtiendo en un grupo residual...

Sol VdB dijo...

Entiendo tu dilema, Ashner: pragmatismo o ideología. Es el dilema que tienen en estos momentos muchos votantes de izquierdas y cada uno debe solucionar en su conciencia. Para mí el tema es ver en qué valores y principios y qué formación política los representa. Porque valores y principios no son una mercadería que se pueda cambiar o intercambiar a antojo: ahora me valen, y los exhibo. Ahora no me valen, y los guardo
Izquierda Unida ha pasado una situación muy difícil, es cierto, por problemas internos de todos conocidos, y por casos puntuales de corrupción, muy pocos. Pero no se ha hundido, ni ha desaparecido, sino que después de un proceso muy doloroso se está rehaciendo día a día desde la autocrítica, la humildad, la reflexión, la confianza y el trabajo de sus militantes y simpatizantes. También ha sufrido y sigue sufriendo un grave acoso y ninguneo por parte de Podemos (sirva como ejemplo su negativo a cualquier confluencia con IU), porque este partido necesitaba que desapareciera IU para ocupar su lugar, y necesitaba su experiencia y sus militantes.
Casi lo ha logrado; pero no lo ha conseguido. En estos momentos, y según los datos del último Barómetro del CIS hechos públicos esta semana, IU ha subido un punto en estimación de voto, alcanzando el 4,7%, mientras que Podemos se ha desplomado y ha bajado al 10,8%, siendo sobrepasado por Ciudadanos. Cada uno puede hacer su lectura de estos datos que, aunque son solo una estimación, muestran también una situación.
Podemos empezó siendo de izquierdas (al menos, algunos de sus fundadores y afiliados lo eran). Y atacó ferozmente a IU, incluso con bombas-lapa internas, como Tania (según los hechos han demostrado posteriormente; no invento nada). Después decidió que erra más rentable ser socialdemócrata, dirigió su mirada hacia el centro izquierda y viró hacia el espacio que ocupa el PSOE, espacio que también consideró como suyo. Y quizá también piense que puede ser neoliberal, y mire a Ciudadanos, cuyo espacio y militantes puede que también ambicione…nunca se sabe.. En fin, lo malo es que está jugando con demasiadas barajas en la mano (además de con mucha prepotencia y soberbia), y los votantes se pueden cansar (se están cansando, según las encuestas), al ver que los principios que muestra ese partido son tan mudables, cambiantes según el lugar y el momento….evanescentes en una palabra. La gente de a pie, que no es tonta, empieza a ver que el mago que les engatusó y entusiasmó en un principio se está convirtiendo en un tahúr, y empiezan a volver su mirada hacia los partidos o grupos políticos que realmente representan los valores en los que creen porque, en la duda, son mejores los originales que las copias. Y es que es una cuestión de principios y valores, no de ambiciones personales.
Un último apunte para reflexionar: los medios de comunicación publicaron ayer los resultados de las votaciones de los militantes de Podemos para elegir su programa electoral: fue elegido el de Iglesias (¿alguien lo podía dudar, conociendo el complicado sistema ideado para que así fuera?). Pero para mí lo relevante es el número de personas que participaron en esa votación: de los tropecientos mil afiliados de ese partido ¡sólo votaron quince mil!.
En las primarias de Ahora en Común, celebradas hace un par de semanas, votaron en Madrid cerca de treinta mil personas.
En fin, el tiempo, que es sabio, va poniendo poco a poco a cada uno en su lugar. Yo si sé a quién he votado y a quien voy a votar.
Un cordial saludo

SolVdB dijo...

Perdonad, me comí dos palabras: para mí el tema es ver en qué valores y principios creo y que formación política los representa